Martín Alcala Rubí es emprendedor uruguayo destacado en el campo de la inteligencia artificial (IA). Cofundó Tryolabs, MonkeyLearn (empresa vendida en 2022) y Ultradrop, en 2023 comenzó un nuevo camino con su cuarta startup, BrainLogic, con la que en setiembre presentó ZAPIA, un agente de IA en WhatsApp diseñado para el consumidor final en Latinoamérica.
Esta empresa logró un gran hito para el sector tecnológico uruguayo al recaudar US$ 5 millones antes de su lanzamiento en un momento de cautela de los venture capital. Este respaldo llegó de grandes jugadores del capital de riesgo estadounidense como Factory HQ, firma de Silicon Valley cofundada por expertos en IA de Stanford (entre ellos el uruguayo Diego Oppenheimer), Anthos Capital, fondo de Seattle con más de US$ 1.800 millones, además de inversores ángeles de Silicon Valley y Latinoamérica.
Lo particular de ZAPIA es permite a los usuarios realizar consultas mediante mensajes de texto, audio o imágenes, en múltiples áreas como educación, entretenimiento y comercio. Todo esto generó que la plataforma crezca rápidamente. En de este año alcanzó los 1,35 millones de usuarios con una retención mensual del 50%.
Actualmente, procesa 100.000 conversaciones diarias.
Estos logros no pasan desapercibidos por el mundo. Recientemente fue seleccionada por la aceleradora de Google en EE.UU. como una de los 1e startups de ese país con mayor potencial disruptivo en Inteligencia Artificial. Durante tres meses recibirá mentorías y herramientas avanzadas de IA, además de US$ 350.000 de crédito en productos de Google.
Alcalá Rubí destacó el momento que vive LATAM para crear proyectos tecnológicos, subrayó la importancia del talento latinoamericano y la creación de un ecosistema de apoyo para emprendedores. “Todavía no surgió en LATAM un Google, un Apple o un Facebook, creemos que podría ser un buen momento para que pase. Latam está en un buen momento para esto”
Pero, sobre todo, subrayó el papel que puede jugar Uruguay donde, reconoce, hay necesidad de que más talento se vuelque al área de informática y tecnología. Asimismo, destacó el trabajo de instituciones como Plan Ceibal y la Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI), las Universidades, ANII, Fundación Ricaldoni, Endeavor, entre otros.
“Soy muy hincha del talento latinoamericano. Puedo decir con propiedad que, luego de trabajar 15 años en IA en Uruguay y con las mejores compañías del mundo, no tenemos nada que envidiarles en cuanto a talento. En las universidades hay cada vez más programas sobre IA, data science, data engineering. También la Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI) de la que formo parte de la directiva durante cuatro años está haciendo un gran trabajo”, señaló.
Sobre el rol del emprendedor, alertó sobre lo desafiante que resulta comenzar un negocio, cómo es convivir con el “síndrome del impostor” y que la clave es tener “resiliencia, creatividad y una visión ambiciosa”. Además, destacó la importancia de aprender todo el tiempo y saber adaptarse.
En su papel de inversor ángel, brindó algunas pistas sobre cómo decide dónde colocar su dinero y energía, además de comentar quiénes son sus “padrinos” en su carrera y destacar sobre todo que en Uruguay “hay espacio para más unicornios”.